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La noticia de la presencia de Jose Muñoz Salvador en las Corts Valencianes ha generado gran controversia en la sociedad valenciana. Y es que no es para menos, el diputado más joven de Vox en la cámara autonómica ha participado en homenajes falangistas a José Antonio Primo de Rivera y defiende el Valle de los Caídos, un lugar que ha sido símbolo de la represión franquista durante décadas. Su presencia en la mesa de edad de la sesión de constitución de la cámara resulta preocupante, especialmente en una sociedad que ha luchado por recuperar la memoria histórica y avanzar hacia una democracia plena y justa.

La admiración de Jose Muñoz Salvador por José Antonio Primo de Rivera y su ideología falangista quedó patente en los homenajes que el diputado participó en el cementerio de Alicante. La figura de Primo de Rivera sigue siendo un icono para la extrema derecha española y es inadmisible que un representante político pueda profesar su admiración por un personaje que representa los valores antidemocráticos y autoritarios que la sociedad española ha estado luchando por superar desde hace décadas.

El Valle de los Caídos es otro de los lugares que ha sido utilizado por la extrema derecha para glorificar el régimen franquista. La defensa del lugar por parte de Jose Muñoz Salvador es un claro ejemplo de que Vox sigue siendo un partido que defiende los valores autoritarios y antidemocráticos que caracterizaron el régimen de Franco. Es inaceptable que un representante político pueda defender un lugar que representa la represión y la violencia de un régimen dictatorial.

La presencia de Jose Muñoz Salvador en la cámara autonómica es una muestra más de que la extrema derecha sigue siendo una amenaza para la democracia y los derechos sociales. La lucha contra el fascismo y la defensa de los valores democráticos y progresistas son fundamentales en una sociedad justa e igualitaria. Es necesario que los partidos políticos y la sociedad en general estén alerta ante este tipo de manifestaciones antidemocráticas y luchen por construir una sociedad más justa, libre e igualitaria.

En definitiva, la presencia de Jose Muñoz Salvador en la cámara autonómica es un claro ejemplo de la necesidad de seguir luchando por la memoria histórica y el avance hacia una democracia plena y justa. La defensa de los valores antidemocráticos y autoritarios debe ser rechazada rotundamente por la sociedad valenciana y por toda la sociedad española en su conjunto. Es necesario que los partidos políticos y la sociedad en general estén alerta ante cualquier manifestación de la extrema derecha y luchen por construir una sociedad más justa, libre e igualitaria.

Compromís ha tomado una decisión importante de cara a las próximas elecciones generales: presentarse con Sumar, una marca propia que les garantice autonomía y una agenda valenciana más fuerte. Esta coalición valencianista tiene como cabeza de lista por Valencia a Joan Baldoví, quien con su experiencia y liderazgo, sin duda, será una pieza clave en la lucha por los derechos sociales y la igualdad que tanto necesita nuestro país.

Este acuerdo se ha ratificado gracias al visto bueno de las ejecutivas de Iniciativa y Més, así como de la Ejecutiva de Compromís. Aunque hubo una abstención, prácticamente fue por unanimidad que se aprobó este acuerdo. Ahora, el siguiente paso es someterlo a votación ante los órganos de representación de la militancia.

La autonomía de los diputados es un tema crucial en la política actual. Por ello, es necesario que los representantes estén en capacidad de tomar decisiones que beneficien a la sociedad en su conjunto. El hecho de que Compromís-Sumar haya decidido presentarse con marca propia garantiza esta autonomía y brinda la posibilidad de trabajar por una agenda valenciana más fuerte, centrada en la financiación autonómica y en la reivindicación de infraestructuras e inversiones necesarias para el desarrollo de la región.

Es importante resaltar que la lucha por los derechos sociales y la igualdad debe ser una prioridad en cualquier campaña política. En este sentido, se espera que Compromís-Sumar tenga una postura clara en cuanto a la necesidad de proteger y garantizar el acceso a servicios básicos como la educación y la sanidad, así como en la lucha contra la desigualdad y la discriminación.

El territorio valenciano ha sido uno de los más complejos de negociar para la plataforma, debido a diferentes factores políticos y sociales. Sin embargo, esta unión es clave para poder hacer frente a los retos que se avecinan en el escenario político español. Unir fuerzas y trabajar juntos en la defensa de los derechos y la justicia social es lo que requiere el país en estos tiempos de incertidumbre.

En cuanto a los datos numéricos y financieros, es importante resaltar que la defensa de los derechos sociales y la igualdad no puede estar sujeta a recortes y ajustes económicos. En este sentido, Compromís-Sumar debe presentar una postura clara y contundente en cuanto a la necesidad de una política fiscal más justa y equitativa, que se centre en asegurar una distribución justa de la riqueza y que permita el acceso a servicios básicos para todos los ciudadanos, independientemente de su condición social.

En conclusión, la decisión de Compromís-Sumar de presentarse con marca propia y autonomía es una excelente noticia para la lucha por los derechos sociales y la justicia en nuestro país. Se espera que esta coalición valencianista tenga una postura clara en cuanto a la defensa de los intereses de la sociedad en su conjunto, y que luche por una agenda valenciana más fuerte y enfocada en la financiación autonómica y en la reivindicación de infraestructuras e inversiones necesarias para el desarrollo de la región. Solo así podremos construir un futuro más justo y equitativo para todos.